Ingredientes:
- 1 kg. de peras (si son grandes, una por persona, en mi caso, que eran pequeñas, puse dos)
- 1 litro de vino tinto, aproximadamente. Deben quedar cubiertas.
- 1/2 kg. de azúcar
- 1 palo de canela
- la cáscara de un limón
Preparación:
Pelamos las peras dejándoles el rabito (en mi caso, como son unas peras de agua con la piel muy fina, no las pelé para que no se me deshicieran)
Las ponemos en una olla y las cubrimos con el vino. Añadimos el azúcar, la canela y la piel del limón y las ponemos a hervir a fuego medio hasta que estén tiernas. Si son grandes estarán en unos cuarenta minutos. Las mías eran pequeñas y en veinticinco minutos estuvieron listas. Además si llevan la piel, tardan más. Lo mejor es probar con una aguja para ver si están blanditas.
Las sacamos y dejamos el líquido que reduzca hasta que se haga un almíbar ligero.
Las cubrimos con el almíbar y dejamos enfriar.
Servimos fresquitas. Acompañadas con helado de vainilla o con natillas, están deliciosas, pero así, sin más, están para no parar. Y el almíbar…. ¡una locura! ¡QUE APROVECHE!
Un postre sencillo y delicioso.
Un besito desde Las Palmas y feliz semana.
que ricas , y un postre muy sano, las fotografias preciosas, besitos
Gracias! Me alegro que te haya gustado. Un besazo para tí también!
Gracias!! No sabes la ilusión que me hace que te gusten las fotos, porque es mi asignatura pendiente! Un beso.
Una receta exquisita. Me la apunto para hacer en casa, a los mios les encantara. Besos
Que ricura…ahora es la mejor época para prepararlas….buena receta !!!!!!
Yo voy con el cucharon jeje … que cosa mas rica por dios, me encantan !!
Besinos
El Toque de Belén
Que pinta tienen!! nunca las he comido y creo que ya va sindo hora.
Besos